miércoles, 13 de abril de 2011

Lágrimas de Alicia...



Está triste, está cansada...
Alicia se ahoga en sus propias lágrimas.



Alicia está harta de verse pequeña en un mundo superior a ella.
Alicia está harta de que le hagan grande y sentirse un estorbo para los demás.

Alicia está cansada de que le juzguen por lo que es y por lo que no es.
Alicia está cansada de ser como los demás esperan que sea.

Alicia se cansa de que le cuenten historias y se rían de su ignorancia.
Alicia se cansa de que le den órdenes sin dejarle opinar.

Alicia tiene miedo a que vigilen sus pasos.
Alicia tiene miedo a estar sola.


Alicia se cansó de seguir al Conejo Blanco, de tomar el té y de recitar poesías.


Alicia está triste, está cansada...
Quiere irse a casa, pero no encuentra el camino.


sábado, 9 de abril de 2011

Envidia en cuatro sentidos



Envidio a quien te puede ver.
Tus ojos,
tu rostro,
tu color.

Envidio a quien te puede oír.
Tu voz,
tu risa,
tu canto.

Envidio a quien te puede oler.
Tu aroma,
tu cuello,
tu ropa.

Envidio a quien te puede tocar.
Tus manos,
tu piel,
tu cabello.

Pero no envidio a nadie por el gusto.
Solo yo te puedo probar.
Tus labios,
tu boca,
tu cuerpo
...


martes, 5 de abril de 2011

El Espejo


    ... Te echo tanto de menos... 

   ... No dejo de pensar en ti en cada momento... Incluso cuando parece que estoy entretenida con otras cosas...

    ... Tengo mucho miedo de perderte... Que esta maldita distancia convierta este velo en un muro que nos separe definitivamente...


Unas gotas de lágrimas caen sobre la foto que sostiene con la palma de la mano. Cerca hay un libro abierto apoyado en la cama y al lado unas tijeras. Enciende un par de velas rojas con un mechero y coloca un pañuelo rojo en el medio de las dos velas, y sobre él, la foto que antes sostenía. Delante del espejo de su cuarto, sentada de rodillas, coge el libro y lo lee detenidamente. Se vuelven a caer unas lágrimas pero ahora sobre la página del libro. Lo suelta delante y coge las tijeras temblando...

Como si se despertara de la siesta, se frota los ojos y se incorpora. El cuarto está oscuro, como si la noche ya hubiese llegado, pero hay algo que refleja luz sobre sus pupilas: el espejo está brillando. Lo mira asombrada, con cierto miedo, pero algo le atrae hacia él. Se acerca, pero no ve su reflejo, sólo una luz azulada y fría...

     ... ¿Lo... Lo... Lo he... Conseguido...? .... No me puedo creer que de verdad haya funcionado...

Como si el instinto guiase su mano, la acerca para tocar el espejo, y para su sorpresa, la mano desaparece. La vuelve a sacar con miedo, y de nuevo su mano está intacta. Se queda unos segundos mirando la mano, moviéndola para comprobar que todo está bien, y luego mirando al espejo.

    ... Bien... Es el momento de ver si de verdad funciona...

Da un paso y entra su brazo y su pierna derecha en la luz del espejo, y luego lo atraviesa el resto del cuerpo. Desaparece del cuarto por completo y la luz del espejo se apaga, quedando todo en la más absoluta oscuridad...

~      ~


Una luz azulada se ve en el reflejo del espejo de otro cuarto. Está sentado delante del ordenador, pero por su espalda empieza a recorrerle un escalofrío que hace que gire la cabeza en dirección a la luz. Se levanta  lentamente y se dirige extrañado hacia el espejo. Y delante de él se queda paralizado al ver que ni su rostro ni sus movimientos son reflejados en el espejo, pero sin  embargo una figura empieza a formarse delante, donde debería de verse a sí mismo con la mano en la boca esbozando un grito insonoro. 

- ¡Esto no es real! ¡No puede estar pasando!

Se encoge en el suelo, y esconde su cabeza bajo sus brazos, deseando que la escena que tenía delante desapareciera. 

En ese momento la figura del espejo abre los ojos y contempla la escena como si estuviera en una ventana. Su mano empieza a salir del espejo lentamente, siguiéndole el brazo, su cabeza y medio torso. Se apoya en la superficie que tiene delante, y lentamente va sacando sus piernas. Acaba cayendo al suelo al salir por completo, y el ruido que ha hecho su caída provoca que el individuo agachado en el suelo delante de ella, le mirara con un rostro desencajado.

    ... No tengas miedo... 

    ... Soy yo... He venido a verte...

    ... Cuando te cuente cómo lo he conseguido... Vas a flipar....

El espejo pasó de tener luz a tener una neblina negra que se iba arremolinando.

- ¡No!...  ¡NO!

Está aterrorizado, conocía quién era esa figura que había salido del espejo, y sabía que no podía ser real... Tenía algo distinto... Sentía frío y miedo... Se le acerca para darle un abrazo, pero sale corriendo del cuarto, y su huida le lleva a salir incluso de la casa.


A la mañana siguiente, mientras lee las noticias:

Una joven ha sido encontrada muerta por su familia en su propio dormitorio. El cuerpo presentaba signos de un suicidio, del cual sus familiares se dieron cuenta demasiado tarde como para poder evitar la cantidad de sangre perdida... [...] Los familiares encontraron junto al cuerpo un extraño libro de rituales y unas tijeras, con las que posiblemente la víctima... [...] ... Y una foto en su pecho, de la cual sus familiares no reconocen a la persona, pero que muy posiblemente sea el principal motivo por el cual la joven haya acabado con su vida trágicamente...


Unas gotas de lágrimas caen sobre la foto que sostiene con la mano... En ella se ve a una joven sonriendo...